
Yo venía hoy a contarles que el periodismo achampañado de El País coloca a Obama en los brazos Dior de Charlize Theron con solo abrir el periódico. A esta prensa decaída, a este centrocuentismo de los tocones a que juega El País, a ese desaliño moral que se encrespa cuando le tocan el pelo al Ché el triunfo de Obama le sabe a teta de novicia. Andan buscando un icono y aunque éste no es de izquierdas ni por el forro, la imagen vale más que mil palabras y ahí le tenemos ya victorioso antes de empezar la batalla, trajeado y bronceado. Nada que ver con el exgordezuelo de la página cuatro, casado con una señora gorda con cara de pánfila ¿no ves la foto, estúpido? ¿Para qué darle más vueltas? ¿Necesitas más datos para saber que el bueno es el negro? No te hace falta ni leer, querido. ¡Qué digo leer! Ni pensar, querido, ni pensar, que ya Barack Obama ha conseguido unir a rojos y azules sobre un fondo de angelicales barras y estrellas.
No sé porqué pero ahora recuerdo a un tal Kerry...
Y luego, la tercerita del ABC. La gran preocupación de Hermann Terstch es el futuro de la izquierda. Y su lenguaje atrincherado y vocinglero. Quiere Terstch escrbir como Espada o hablar como Losantos y se quedan sus artículos en los de un jefe de centuria de aquellos que cubrían su pecho de azul, español, por mayor meritaje intelectual. No hace falta ir muy allá para saber que el que más grita suele ser el más débil.
Pero llega el correo catalán y con el relato simple de una noche en urgencias nos descompone el día. Sé que duele el caso único que no es el único caso. Pero duele porque ofende que a dos personas (dos mujeres en el libreto original)se les dice que la próxima vez que su padre agonizante asome por ese lugar tal vez no se le atenderá.
Mañana más.
Sobre la inversión en infraestructuras morales
Querido J:
El mismo día de finales del año que algunas ambulancias quedaron bloqueadas durante horas en el túnel de acceso al Clínico de Barcelona, dado el colapso de los servicios de urgencias, dos mujeres llevaron a su padre al hospital porque se moría, víctima de una anemia crónica. Pasaron el calvario imaginable de un mal día de invierno tumultuoso y gripal hasta que los médicos lograron reanimar con una transfusión el cuerpo quebrado del anciano. Mientras aguardaban las mujeres mantuvieron breves conversaciones con los médicos y el resto de personal facultativo, que tienen un extremo interés para explicar el funcionamiento real de la vida en una ciudad avanzada del Primer Mundo. Tú sabes que a mí me interesa mucho lo que llaman Vernacular Photography, esas fotografías tomadas por aficionados sobre los grandes momentos de la vida pequeña. Los vernaculares aprecian mucho los mazos de fotografías que se ofrecen en los rastros de gente que ya nadie reconocerá, y donde el ademán, los trajes, la decoración o cualquier otra circunstancia de la toma explican mucho de quiénes eran y de cómo vivieron, todo en el trallazo de un flash. En el periodismo siempre han convivido el alma de la generalización y la síntesis, imprescindible para que el periodismo cumpla su función de elaborar el guión diario de la vida (lo que llamamos actualidad), con ese gusto vernacular de explicar a los hombres de uno en uno. En los últimos años la decantación del oficio por la primera de sus obligaciones ha sido evidente y excesiva, y puede que el éxito de los blogs y otras formas de comunicación microcelular tengan que ver con el exceso. El periodismo titula que algunas ambulancias pasaron varias horas en el túnel del Clínico o que en La Paz de Madrid han tenido que habilitar la sala de fotocopias para instalar camastros con enfermos. Pero no siempre se detiene a explicar qué pasa por dentro de los titulares. Hay palabras, imágenes, poses, movimientos: existen aunque sean casi inaudibles y no puedan generalizarse.
Cuando acabaron con la transfusión los médicos dijeron a las dos mujeres que se llevaran a su padre a casa. Fue entonces cuando añadieron que no tenía el perfil adecuado para estar ingresado en el hospital. El padre es, como te digo, un enfermo crónico y ha cumplido los 86 años. No daba el perfil. Ellas protestaron, y pidieron algo más de tiempo para ver su evolución y no tener que plantarse a las pocas horas en el hospital si el anciano consumía con venenosa rapidez la sangre implantada. ¿Que tenemos que hacer entonces, llevárnoslo y volver al rato a urgencias para que lo visiten de nuevo?, especularon las mujeres. Fríamente le contestaron: en el caso de que vuelvan veremos si lo visitamos o no. Así fue, y es natural que no lo creas. Ellas tampoco, y acababan de oírlo. Durante un rato no pasó nada. Quiero decir que no echaron al anciano ni riñeron a las mujeres por su conducta. Luego volvió otro médico. Hablaron y les pidió disculpas en nombre de su colega. Estaba siendo un día muy difícil. Pasaron más horas y hubo un cambio de turno. Hay una bonita descripción a hacer de los cambios de turno y cómo y con qué procedimientos los médicos informan a sus relevos del estado general de la planta y de sus plantaciones. Te lo ahorraré. Lo cierto es que otro médico se acercó donde el anciano para examinarle superficialmente. Levantó la cabeza, e iba a irse cuando una de ellas le preguntó por las perspectivas. El bravucón no se inmutó y le espetó: ¿Y usted cómo lo ve?
Párate un momento aquí. Veo muy bien ese fastidio del médico. De hecho lo he visto varias veces. Ancianos. Es un fastidio cargado de reproche. El médico cree, o quizá sepa, que lo que él puede hacer por el anciano pueden hacerlo las hijas en su casa. El médico examina también las circunstancias sociales. Las circunstancias sociales son que hay pocas camas y poca sangre y que este hombre morirá ineluctablemente después de que el hospital haya derrochado espacio y sangre con él. En cuanto a las hijas, es simple: se trata de su padre y respira y entiende, y son los últimos días y son muy valiosos todavía. El punto de vista del médico se comprende perfectamente. Sólo tiene un problema, de tipo cultural. Es preciso reconocer que la muerte, en muchos casos, y crecientes, de ancianidad, es una decisión social y no individual. Para el hospital este hombre ha cumplido el ciclo de su vida y sólo la obstinación familiar (que nunca es idéntica en todas las familias) permitirá una prórroga. Una prórroga que algunos médicos no dudan en calificar de inmoral, en la medida que puede atentar contra los cuerpos jóvenes y con expectativas. Otro día discutiremos eso, si hay que discutirlo. Lo que marea es el descontrol del médico: que suba a su boca ese usted cómo lo ve, siniestro y cargado de desdén. Las infraestructuras morales del técnico. El último fragmento de conversación vernacular tuvo un carácter didáctico. Otro médico quiso explicarles a las dos mujeres cómo lo veía él. Su tono era, en sí mismo, pura epidemia, la prueba de que quizá hayan cedido todos los esfínteres. Les dijo que su padre era uno de esos pacients titella (te lo dejo en la lengua original para hacerlo más potentemente vernáculo). Ellas al principio no comprendieron porque titella, como sus equivalentes castellanos títere o marioneta, tiene connotaciones complejas. Pero sólo quería decirle, el buen doctor, que son pacientes colgados de un hilo. Es cierto, eso sí, que tuvo la delicadeza de no indicarles que el hilo eran ellas.
La percepción social en España indica que cuando alguien tiene un problema técnico serio debe acudir a la sanidad pública. Es una percepción que se asemeja bastante a la necesidad de comprar los alimentos en lugares que tengan mucho giro y donde la renovación sea frecuente. La misma percepción indica que se ha llegado a un punto en que los modos humanos hay que comprarlos. En el Hospital Clínico de Barcelona hay una zona Vip (Barnaclínic) donde los pacientes pagan por el uso de determinados servicios. Tiene una reputación excelente. Lo mejor de ambos mundos. Mucha salida de género y, por lo tanto mucha casuística; pero también una planta donde a nadie se le espeta que su padre es un titella. Nunca creí en la pavada psicoanalítica de que la palabra curase. Pero es segurísimo que hiere y enferma.
Hay otro asunto, ya final. Qué diferencia más significativa de percepciones sociales ofrecen las dos grandes vértebras del sistema público, la educación y la sanidad. El primero pasa por ser un ámbito técnicamente incapaz, donde los clientes son los amos y los trabajadores las víctimas: los clientes reciben un trato tan amable que tienen permitido subirse a las mesas y, de cuando en cuando, largarle un amable papirotazo al que profesa. Por el contrario, los protocolos del hospital presentan una característica muy interesante: la humillación ha desaparecido. No, desde luego, porque los pobres pacientes pudiesen humillar a alguien. La razón es que dado que van a salvarte la vida cualquier afrenta deja de existir para los dioses. Es la sonrisa nerviosa y dulzona con que se celebra en la habitación la llegada de la áspera enfermera; es la mirada húmeda y reverencial con que el familiar acepta el dicterio del mocito con wambas rojas y fonendo al cuello, vestido al más puro estilo casual clinic, cuyo trato a la máquina que le suministra los análisis para sí lo quisiera el moribundo que la máquina sentencia. Es la tremenda e inaceptable evidencia de que hay enfermos (y enfermedades) con glamour, que atraen los cuidados. Es la lección insuperable de mis dos mujeres y el paciente titella: el argot profesional, críptico y secreto, se exhibe en público sin mayor aduana, se trate de la desacomplejada, obscena titella o de la insufrible pedantería defensiva del psiquiatra que habla en griego con su paciente, con el fin terapeútico de reforzarle su analfabetismo. No se prescribe la lengua común, respetuosa, pactada, inteligible entre iguales. Ya sólo hay argots. Otra prueba de la imparable decadencia del espacio público, hoy ya sólo símbolo de la desigualdad.
Sigue con salud
69 comentarios:
La situación de inferioridad que tiene el paciente ante el médico se debe a que el paciente pide ayuda y el médico tiene la posible solución. Esta desequilibrada relación la intenta equlibrar el paciente por diversas técnicas:
- La que utiliza mia abuela que es intentar caerle bien "soy su mejor paciente".
- La presión más o menos velada de la posible denuncia (Las mujeres de abogados reciben menos extirpaciones de útero).
- La exageración de los síntomas para compensar la sensación de que si no, no nos van a dar importancia.
Muy optimista pensar que el médico tiene la solución.
Ya nos gustaría a todos.
Si de alguna manera no debe leerse este artículo es de una forma gremial y corporativista.
Me parece que la secuencia clave es aquella en las mujeres y el cabellero con espada se dan cuenta de que el hecho de morir ha pasado a ser un acto social. Y que ésto acaece ante sus mismas narices.
Cierto es que hacer cola en Urgencias, cuando estás enfermo, jode y mucho por mucho Doctor-Chema-Solidario que haya.
Todo es un acto social.
Cada vez se sacan menos mocos la gente en los semáforos.
(Nos vamos a la cabalgata de reyes. A luchar por capturar mayor número de caramelos los hijos y los padres.
Lo bonito es que, año tras año, una vez desaparecida la última carroza, los menores se reparten equitativamente las ganancias.
Menos mal.)
A mi me gustaría oir la visión de los médicos de los que habla Arcadi. Eso es el periodismo ¡estúpidos!
Arcadi enseña periodismo, pero utiliza el periódico para contar sus cosas, hablar de él mismo y mostrar la realidad bajo un solo prisma.
Arcadi dice por la radio que el ministerio de Economía no tiene sentido, que el gobierno poco puede hacer en casi nada y después apoya a la UPD en las elecciones.
Guardias de 36 horas, dos problemas cada 5 minutos, tu jefes diciendote que vengas cagado de casa para no perder un minuto en el trabajo y encima aguantar el sermón sabatino del padre Arcadi.
Arcadi, que por decir boutades media hora en una tertulia matutina de radio cobra lo que nosotros en una semana nos da lecciones ¿de qué?
Lo que más me ha dolido ha sido el dibujo que acompaña al texto de Espada: Un señor cargando como Jesucristo con la cruz pero la del Insalud.
Se acabó esta historia. No merece más.
Mira Sarapo, no me vengas a decir como tengo que leer ¿vale?
Hombre, Devisita, sacarse los mocos en el semáforo no un acto del mismo rango que hacerse una paja. Pongo por ejemplo. Y así todo.
A mi me parece que la secuencia clave es cuando descalifica a un trabajador (un mocito) por su calzado.
El elitismo de la izquierda de Arcadi.
Hoy también traía el periódico algo sobre un plan del Gobierno Vasco para explicar a los escolares qué cosa es una víctima del terrorismo.
Da miedo con sólo imaginarlo cuando la mayoria de miembros de ese gobierno aún no saben qué distancia les separa de los asesinos.
Chema, independientemente de lo que digan los médicos implicados, que seguro que van a tener que defenderse, mí me duele y mucho ese artículo. Por puro egoísmo. Porque no me gustaría ser una de esas dos mujeres y mucho menos no ser el de enmedio en ese caso.
Y en las páginas de salud de "El Mundo" dicen que las mujeres de 40 tienen que hacerse una mamografía todos los años y los hombres el PSA también anual.
Después la gente lo lee y hay que explicar que no es así en 2 minutos.
Y lo de las bambas, mira que se lo tengo dicho a Mecanikong XY, que se ponga zapatos.
Chema ¿regalaronte ya la Wii?
y a mi tampoco me gustaría, pero no puedo colocarme del lado del que actúa con esta superioridad, del que dispone y usa de una página entera del periódico para contar su caso y tirar por el suelo el trabajo de cientos de personas que pasan a estar en el bando de los crueles y prepotentes médicos.
De todos modos sé que esta batalla está perdida y lo único que queda es intentar salir del paso en el trabajo diario y dar las gracias a ciudadanos tan majos como Espada que tienen la amabilidad de pagarnos el sueldo.
Yo seguiré oyendo los anuncios de la radio y comprando el periódico para pagar el de Arcadi.
Alas, seguid con salud que hay gente muy mala en los hospitales.
A mí lo que me duele es que a Chema le haya dolido el dibujito del señor con la cruz insaludaria a cuestas (eso lo que más) y también me duele que le haya dolido el artículo (parece que algo menos). Vamos a ver Chema ¿cómo te va a doler lo que publica un chalado que lleva años soltando paridas? Un chalado al que generalmente no se le entiende la mitad de lo que escribe y que usa mil palabras para exponer una idea que el común de los mortales expresa en diez. Claro que, supongo que escrito mareado por el dolor, lo de "el elitismo de la izquierda de Arcadi" es un poco fuerte (algo menos que la tontería sarapiana sobre la cercanía del gobierno vasco y los terroristas). Si ya teníamos bastante con considerarlo un mito de la intelectualidad, colocarlo a la izquierda de algo (ni de Jiménez Losantos)es situarlo en el lugar inadecuado. Aunque también entiendo a Arcadi, no es fácil seguir en ese difícil equilibrio contentando a los que le rinden pleitesía mediante la suelta de sandeces inventadas. El artículo no capta un hecho, lo construye a la medida porculera de Arcadi. Que no te duela, Chema. Si lo más seguro es que nunca haya pisado el Insalud ni conozca a nadie que use la sanidad pública.
¡Ostras, una pelea!
Venga, Chema, con quién la van a pagar si no es con el de la ventanilla empanado en el disparate por arriba y por abajo y obligado por su profesión a ponerlo TODO a cambio de dos o tres mil euros/mes con suerte ¿Eh?
Esa percepción es muy común en los *usuarios* de las URGENCIAS PARA TODO.
El título del artículo ... no sé, no sé ¿Es eso posible ya?
En cualquier caso es algo más que las bragas de la Bruni.
Foca escocida y con el GPS a la deriva.
GPS supongo que son las siglas de Gran Pantomima Sarapiana cada vez que habla del líder.
Foca, presumo de no seguir a ningún líder. Espero que el primer gol del Mallorca te relaje y des alguna razón sobre el tema que vaya mas allá de la descalificación personal de Espada.
PD. Por cierto, ya que lo he visto te diré que Espada ha pasado unos cuantos ratos en Urgencias de la SS Algo que tú no puedes decir de ciertos locutores que son capaces de expresar una idea en una sola línea y de mear sin echar gota. Esa sí, es la izquierda exquisita.
Dime de lo que presumes y te diré de lo que careces.
La salud de Saramago experimenta una mejoría
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José Ramón Sánchez
Arrecife (Lanzarote)
Tras días de incertidumbre, José Saramago ha mejorado de modo muy notable de salud en las últimas horas, hasta el punto de que es factible que el Nobel de Literatura de 1998 reciba el alta médica incluso en este mismo fin de semana. El literato afincado en Tías supera así la crisis respiratoria que forzó su ingreso hospitalario.
Saramago lleva semanas aquejado de una fuerte neumonía, como quedó en evidencia en actos recientes, como la inauguración de las muestras sobre su obra que patrocina la Fundación César Manrique (FCM); o la presentación en sociedad de la obra teatral In Nomine Dei. El ingreso en Hospiten Lanzarote, en Puerto del Carmen, a escasa distancia del hogar familiar del escritor, se produjo el 18 de diciembre, estando el escritor acompañado en todo momento por su esposa, la periodista Pilar del Río.
Esta crisis de salud, con estancia incluso en la Unidad de Vigilancia Intensivas (UVI) hizo que el ilustre vecino de Tías pasará ingresado fechas tan señaladas como Nochebuena, Navidad y Nochevieja.
Vigor.
Cabe señalar que la mejora sustancial de las últimas horas experimentada por Saramago ha hecho que el escritor incluso ya esté pensando en acelerar la creación de una nueva obra. En estas fechas se cumple casi el primer año desde la presentación de Las pequeñas memorias, texto que se centra en la infancia del creador nacido en Azinhaga, cerca de Lisboa, el 15 de noviembre de 1922. El Nobel luso cuenta con 85 años de edad.
Ánimos desde la calle de amigos y familiares.
La despedida de 2007 y la bienvenida de 2008 no fue ni mucho menos tediosa para el escritos portugués. Se debió a la convocatoria por sorpresa de familiares directos y políticos, desplazados desde Portugal y desde Granada, que supieron aprovechar la posición estratégica, mirando al interior de la Isla, de la habitación de Hospiten Lanzarote en la que José Saramago lleva más de dos semanas ingresado, siempre con Pilar del Río.
Desde la calle, los seres próximos al escritor supieron colocar pancartas de ánimo, para desearle al literato una buena despedida de 2007, así como un saludable paso por el 2008. Estos mensajes no dejaron indiferentes al escritor, quien se insufló de energía para volver al trabajo en breve. También se hizo la ola. La iniciativa contó con respaldo del personal de Hospiten, con lágrimas de emoción incluso por parte de algunos colaboradores.
Permítame, Sarapo, que si usted presupone que "quiere Terstch escribir como Espada o hablar como Losantos" yo presuponga lo que me dé la gana sobre Arcadi. Lo de dar razones, descalificado el autor, descalificado el articulito. Vamos, que no me creo que haya pasado nada de lo que cuenta el líder. Además vayamos a lo importante que eso no lo ha contado aún ¿el señor ha fallecido y tenían razón las protagonistas o sigue vivo y tenían razón los médicos de formas groseras?
Cargar contra el mensajero no es ninguna novedad ¿unas posibles malas condiciones laborales justifican que se pueda tratar a las personas de forma indigna? Pues no. Podemos correr a imaginar que esos médicos llevaban trabajando continuadamente 36 horas de dura actividad y que estaban relativamente mal pagados. Pero también podían, perfectamente, estar cobrando seis o siete mil euros mensuales, y llevar una jornada más relajadita.
El mal trato, real, ficticio o exagerado, que reciba profesionalmente un médico no puede servir de patente de corso, no debería usarse para irresponsabilizarse o negar cualquier posibilidad de crítica. Y un profesional de la categoría que se le supone a un médico debería de estar dispuesto a tratar y enfrentar las críticas con paciencia, y, también, a agradecerlas.
En fin, y si Arcadi Espada es un chalado que suelta paridas ¿qué podríamos decir de todos nosotros? Claro que quizás su chaladura esté en considerar que aún se puede guardar el respeto entre los semejantes.
Un saludo y feliz año nuevo a todos
mejor me callo hoy.
Vaya, vaya, aquí se tira con cañón da igual que sea Miterrand, que los padres de Madeleine, que el lucero del alba y lo de chalado al Arcadi escuece...
Verá, meló cucurbitaciet, está fatal de los fatales que se trate mal a los pacientes. El problema del artículo es que no se queda en el relato del caso y de lo muy abominable que tal comportamiento le merece, si no que va cogiendo carrerilla y acaba en la categoría de que todo el Insalud es una mierda.
Perdón, me he pasado, Arcadi no habla de mierda, solo de imparable decadencia. Claro que si no hay forma de pararla, acabaremos en la mierda pero debe ser que aún falta un tiempo. Mis disculpas.
Hola a todos.
Estoy de vuelta. Y parece que también Lafoca, que ha vuelto dando caña. Un saludo, señorita.
Yo, como Casale, hoy mejor me callo. Aunque no sé si podré.
Sr. Melo, no disculpo por escaso pago groserías o bravuconadas (para valorar esos dos adjetivos tendría que haber estado presente) y si nos leé de continuo recordará una fea experiencia como paciente, que conté aquí, en las urgencias de uno de los hospitales que cita.
No se si merece la pena que le diga que he tenido muchisímas más broncas con colegas que con enfermos y, sí, alguna vez he tenido que decir a la familia que me expliquen como lo ven ya que ellos conocían mejor el caso por tenerlo próximo y de continuo que yo que acababa de llegar de nuevas.
Pero Foca,¿qué le ha hecho Arcadi a usted? A mí hay mogollón de cosas de Arcadi que no me gustan, y hay otro mogollón de ellas que sí. Estoy con Meló, si el dice paridas, joder los de esta tropa en la que me incluyó.
Por cierto Sarapo, muy buena su introducción. Emulando al líder.
Vale Pipurrax, es una situación desequilibrada, pero a mí lo de inferioridad me revienta. Lo que si que es cierto que algún médico que he conocido te hacen rebajarte a niveles poco humanos solo para hablar unos pocos minutos contigo.
En CyL la cosa es franca decadencia. En mi centro de salud hay tres médicos, antes cuando uno vacacioneaba o tenía baja (en situación de inferioridad, me temo), traían un sustituto. ahora se reparten el trabajo entre los otros. Eso, con perdón, es una mierda.
Terreiro, los de "esta tropa" no somos luciérnagas mediáticas (iba a decir estrellas pero recordé que hablaba de Arcadi), de usted se espera que no derrame el café y lleve a buen puerto la seminci; de Catalino que no se le mueran los pacientes y de Viejo Casale que los archivadores no casquen (y el Valencia tampoco), aparte de todas las bondades que se les suponen en su vida privada. A Espada que no diga memeces.
Foca, Espada lo que dice mayormente, por replicar a Pipurrax es que hay mucho médico que va de puto House sin tener la puta gracia de House y que en grandes hospitales como La Paz o el Clínico de Barcelona la vida y la muerte quedan bordás en la boca de Merceditas la del guardarropas.
No creo que sea neceasrio abundar sobre el declive de la integridad profesional en nuestro tiempo. Eso sería decirle a gente solvente como Saramago que miente. Y eso sí que no.
Como sabeis (se colgó aquí el otro día) ha salido un jefe de la sanidad pública asturiana a decir que los empleados tienen que ir al trabajo cagados, desayunados y con el periódico leído.
Habitualmente cumplo las dos primeras y el periódico lo leo después de comer.
Para compensar traigo unas declaraciones de hace 9 meses del que era entonces gerente de la sanidad pública asturiana, Juan José Cañas, del mismo partido que el anterior pero a lo que se ve con mejores formas:
-¿Sueña con el día en que todos, o la mayoría de los médicos, dediquen a su trabajo siete horas diarias enteras, por ejemplo de 8 de la mañana a 3 de la tarde?
-Yo estoy convencido de que la inmensa mayoría dedica más de siete horas.
-¿En su puesto de trabajo?
-En su puesto de trabajo. Lo que pasa es que ¡ojo! su puesto de trabajo no es estar sentado detrás de una mesa en la consulta. Un médico es un trabajador que tiene distintos puntos de trabajo dentro de la organización, pero que también tiene la obligación de estudiar, de formarse, de formar y de investigar. Muchas veces, a lo mejor, no se les ve, pero sin duda están trabajando. Me gustaría que en el conjunto de la sociedad se trabajara tanto como se trabaja en sanidad.
Foca, que no le duelan mis dolores que son leves y autolimitados.
Catalino, usted sabrá lo que resulta conveniente hacer, que en eso no me meto; y efectivamente, en ocasiones no es fácil valorar si una conducta es irrespetuosa, aun estando presente. Como usted ha dicho, el médico es la cara del sistema sanitario, para bien y para mal, y en el caso presente pues es el medio del que se ha servido Arcadi para concluir observando la decadencia del espacio público. No ha dejado lugar a la defensa, como señala Chema, y no deja de ser una anécdota.
Foca: el Insalud no existe (lo que no quiere decir que acabe de desaparecer su centro de salud; solamente que ya no se llama así)
Pues si el Insalud ya no existe y Chema dice que el dibujito del artículo es la cruz del Insalud, o Arcadi no se entera y cualquier día coloca la bandera con el aguilucho o Chema no sabe por donde anda.
La situación de inferioridad se borra de u plumazo desde el momento que se comprende que a ese señor, quien le está pagando, quien le está solucionando su vida, soy yo. Él me cura, yo le pago. pero clao eso en el sistema público se diluye demasiado.
Foca , permítame decirla, con todo respeto, que lo suyo con Arcadi roza lo irracional.
No se lo tome a mal, a mí me pasa lo mismo con muchos otros.
No me lo tomo a mal, nunca he presumido de racional. En cuanto a lo de que le pagamos el sueldo pues sí, pero como nunca he conocido a nadie que pague todos los impuestos que debiera pues a lo peor solo estamos pagando una parte.
Aviso a navegantes: en el Nickjournal arcadiano, artículo sobre los niños de altas capacidades, con énfasis en las canarias. No he entendido demasiado así que no puedo comentar nada más.
Foca, ya pareces el Consejero Quirós descalificando al sufrido funcionario.
Lo siento por la victoria del Barsa y por el tirón que va a pegar el Español.
¡Ay, Melò! Si yo creo que en lo de la decadencia de lo público se ha quedado corto y eso que no adivina lo que va a pasar cuando abran todos los hospitales pendientes... Le adelanto que mi territorio se queda con un 40% del personal que tenía, así, de entrada y sin extenderme.
Voy a ver si los Reyes me traen las Duracel que les pedí.
Esto... ¿he descalificado a los funcionarios?
Voy a aclarar lo de la cruz.
Efectivamente la del dibujo no es la cruz del Insalud, pero en el contexto del artículo está claro que representa esa cruz
y esta
y esta otra.
Chema, que le hemos pillado, que ya no sabe el organismo que le paga. Ay, señor, si Arcadi al final tendrá razón y los médicos no solo son cavernícolas, también un poco dejaos.
¿Pero qué dice?
El 20% de los niños del estado de Ohio pasa hambre.
Me despido de ustedes.
¿Qué línea de las cinco es la que no entiende?
Parece que a Chema y Sarapo se les fue la mano y ahora recogen vela.
Lafoca, como siempre, con el culo al aire. La pobre.
A mí también me parece Arcadi un pesado. Tampoco tiene él la gracia de House aunque sí la mala leche.
Las cinco.
Creo que me he quedado corto.
Cierra un blog y abre otro.
Nuevo blog de Arcadi Espada
Opinaré allí sobre la columna de ayer.
Arcadi sueña con ser el Carl Bernstein o el Bob Woodward del periodismo español. Para lograrlo precisaría encontrar un Watergate a su medida y como no lo encuentra –no sé si por incapacidad o porque el país no da para tanto- se dedica a ejercer de destripaterrones de la crónica de sucesos.
Suscribo el valiente e inapelable artículo de maese Espada. Los que venimos de familias no precisamente ilustradas y con enfermos crónicos hemos tenido que aguantar la escena: "es la mirada húmeda y reverencial con que el familiar acepta el dicterio del mocito con wambas rojas y fonendo al cuello, vestido al más puro estilo casual clinic".
Luego uno crece, lee y vive. Y finalmente mira al médico por encima del hombro.
Pensaba que la idea era estar al msimo nivel. La igualdad y los derechos.
Parece que el objetivo de los que estuvieron por debajo, es mirar por encima del hombro.
Cuestión de altura. Aunque para eso se tengan que subir encima de los libros leidos.
Boswell, en cualquiera de las dos acepciones que la RAE da al adjetivo inapelable, anda usted (h)errado al escribirlo en esa frase.
Y hablando de mirar por encima del hombro parece más bien asunto de malvivir, leer en diagonal y decrecer.
Hay dos mundos, el de la ciencia y el de la palabería. No nos engañemos, existen escritores de igual calidad en Perú que en Suecia, pero la diferencia la marca la ciencia. Por eso acceder a medicina exige un 9 de nota media y hacer periodismo un 5. Total para perseguir a Jesulín.
El de las bambas, aunque no lo parezca ha superado muchos filtros.
Otra cosa es que no les traten como personas humanas, que sin duda lo merecen.
1. No conozco a Arcadi
2. En general no me gusta lo que he leido de el.
3. Creo que Chema tiene razón pero....
4. En los 11 años que llevo trabajando en hospitales (5 distintos) he visto escenas como estas con mayor o menor frecuencia.
5.Creo que es cierto que en los servicios de urgencias cada vez se producen con mayor frecuencia. Hay mucho incompetente suelto ultimamente.
6. Los responsables son los comepollas de los "gestores", que ninguno de ellos ha brillado primero en su especialidad (si la tiene) y generalmente es el tonto de la promoción que nunca le puso pasión a este oficio.
7. Hoy me gusto tu gente JJ
Me gustaría saber qué pasa en realidad en Barnaclínic. Arcadi da por hecho que es un jardín de rosas y no suele ser así. Pero el simple hecho de la coexistencia de ambos espacios en una institución pública.
Para mí la mala comunicación médico paciente es un mantra interesado. Sucede que hay noticias que duele mucho recibir.
Y sí. Tras los 86 años del señor con anemia de procesos crónicos hay mucho joven con bambas rojas que se ha dejado la adolescencia y la juventud bajo el flexo. Ojalá siga habiendo mucho casual clínic.
De acuerdo en lo nocivo del efecto House.
Pedazo de partido que ha hecho el Zaragoza. Al maño casi le da un infarto. Y a mí otro. Uf.
Conozco un señor que cada 6 meses se cambia de médico.
Le pregunté por qué y me contestó que ese que padecía el síndrome de la libre elección.
Ahora sigan hablando del efecto House.
El otro día me quedé con las ganas de contar los "antecedentes" del enfermero que cerró la planta a la que entré por la ventana.
Fue tres veces llevado a los tribunales por las autoridades del Hospital y las tres veces defendido "a muerte" por el sindicato y sus abogados.
En el camino consiguió que una doctora se fuera del centro harta de obscenos carteles anónimos (no se pudo demostrar) y tal y pascual.
Un sistema que no discrimina al bueno del malo y una justicia tan garantista (se dirá así) que defiende "a muete" al supuestamente débil también tienen algo que ver, D. Jordan.
(Esto es una provocación para que salte Art)
Mis regalos de Reyes.
Pack de calcetines, calzoncillos y camisetas. Esto es todos los años un fijo.
Teletarjeta para pasar peajes.
Mancuernas y mando a distancia de la tele nuevos.
Playstation 3. Compartida.
"Luego uno crece, lee y vive. Y finalmente mira al médico por encima del hombro."
Joder, James, pues aún te queda mucho. Mira. Hay gente que se planta delante del médico y le dice "estoy aquí, no he pedido hora pero me tienes que atender", otros te dicen "quiero que me mandes a tal especialista y no quiero contarte porque", otros "no tienes ni puta idea pero no voy a cambiarme de médico porque no me apetece contar a otro las mismas cosas", otros piden que el médico vaya a verles a casa no porque no puedan salir si no porque está lejos, el taxi es caro y es mejor que vaya el médico.
Y así... y lo peor es que si haces frente "el sistema" les acaba por dar la razón.
No basta con mirar por encima del hombro, te falta el conseguir faltar al respeto que tiene que haber entre las personas, que para eso pagas.
Creo que habría diferenciar dos cosas. Ambas pueden coexistir.
- El modo como algunos médicos tratan a sus pacientes. Se quiera o no, Pipurrax lo explicaba muy bien, están en una situación de superioridad porque el que tiene un problema es el paciente y el médico tiene el poder de tomar unas decisiones u otras. De este poder se puede abusar. No sé en que medida abusan, pero es posible que existan excesos.
- El modo como los pacientes tratan a los médicos. Existe una crisis de autoridad generalizada y muy profunda que lleva a mirar al que tiene poder como alguien privilegiado que se aprovecha, que no está al servicio de la gente y que hay descubrir su trampa y denunciarlo.
Y al mismo tiempo hay una mentalidad de que lo actual es reclamar tus derechos (porque por lo visto siempre te los está pisando alguien), que no hay que callarse nunca, que todo el mundo sabe de todo y que el funcionario (el médico) es un vago al que hay que espabilar, porque su sueldo lo pagan tus impuestos. Esta mentalidad, hace que algunos enfermos (tampoco sé en qué proporción) se porten de un modo completamente maleducado y perjudiquen mucho el ánimo y la autoestima del médico.
Creo que ambos abusos (el del médico respecto de los pacientes y el de los pacientes respecto a lo médicos) existen y es muy fácil que cuando ustedes los denuncian todos lleven razón. Que exista uno no excluye que exista el otro. Y que exista uno no justifica que exista el otro. Ustedes habrán de determinar cuál es más grave hoy en día, cuál está más extendido o en que proporción se da uno y otro. Yo para eso soy completamente ciego. Sólo sé ver a través de los ojos de los otros.
De acuerdo con Loia salvo en:
"Ustedes habrán de determinar cuál es más grave hoy en día, cuál está más extendido o en que proporción se da uno y otro."
No. Para hacer eso hay otros a los que también les pagamos el sueldo.
Roscón, scalextric, big pirate, barco romano de playmobyl, construcciones, futbolín, más scalextric, más roscón...
En fin que los Reyes se han portado.
Ahora su regalo de ustedes. Un viejo cuento.
Loia, ponga alumnos* donde puso enfermos* y profesores donde médicos y... "determina cuál es más grave hoy en día, cuál está más extendido o en que proporción se da uno y otro."
Volvamos a la estadística. Entre los médicos, abogados, fontaneros, electricistas, periodistas, políticos, curas, sindicalistas (guiño a Cat), etc., hay, en principio, el mismo porcentaje de gilipollas, maleducados, prepotentes, ladrones, bienintencionados, sensibles, hipertensos, etc. La diferencia, por tanto, no está tanto en el “como se es” si no en la posición que se ocupa; mientras un médico maleducado o prepotente es noticia de amplio alcance, un electricista de iguales características sólo es noticia en su casa o, como mucho, en su comunidad de vecinos.
Como siempre procuro quitarle hierro a las cosas recurriendo a Santa Estadística que nos sirve para explicar muchas cosas.
No creo que, en general, la profesión marque carácter o esté predestinada para uno.
Si vuestra majestad es feliz, significará que lo somos todos los españoles.
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